La Plaza Mayor de Salamanca es sin duda la mayor de las plazas, pero tal vez no precisamente por su tamaño, sino también por su papel como espacio articulador del tránsito peatonal y protagonista de una gran parte de la rutina diaria de muchos salmantinos y visitantes. Lógicamente, su arquitectura, los materiales y el legado histórico, la convierten en un lugar simbólico de la ciudad y, en consecuencia, de llegada, de partida y, por su puesto, de paso de miles de personas diariamente.
El tráfico motorizado, según la Ordenanza de Tráfico y Seguridad Vial, permite la carga y descarga en el ágora todos los días salvo domingos entre las 7 h. y las 11 h. Una franja horaria que permite abastecer al numeroso elenco de bares, restaurantes y tiendas en general. Hasta ahora, la bicicleta también es un medio de transporte que no ha sido discriminado y que por lo tanto, salvo circunstancias particulares, ha disfrutado de la benevolencia de la policía municipal. No en cambio su trato de cara al aparcamiento.
Si analizamos la presencia de la bici en relación de la gran demanda que tiene la plaza como lugar de llegada o punto final de los desplazamientos barrios-centros, encontramos un defecto que llama la atención. Se trata del aparcamiento de bicicletas en los entornos de la plaza. Algunos os acordaréis de cuál era el aspecto de la Plaza del Corrillo antes de la remodelación que vemos hoy. Allí, además de existir una parada de taxis, había un aparcamiento de bicicletas. Bien, pues tras la reforma integral desaparecieron los taxis y, desafortunadamente, también el aparcamiento para bicicletas. Ahora, contamos con una hermosa plaza que además cuenta con un banco corrido que la cierra y una zona de aparcamiento de motos que ni siquiera está señalizada.
Con la reciente reforma del entorno del Mercado Central (y cale Obispo Jarrín), tampoco se ha tenido en cuenta a la bicicleta. Sí en cambio se han extendido las terrazas lo cual no vemos del todo negativo pero, en cualquier caso, lo que no saben los técnicos que firmaron el proyecto o los que otorgan las licencias de las terrazas es que muchos clientes de esas mismas nuevas zonas de ocio es que también acuden en bicicleta. ¡y cada vez más!
En definitiva, no existe ni un solo aparcamiento de bicicletas a menos de 200 metros de la Plaza Mayor. De hecho, el único que se puede ver en la siguiente fotografía es el de la calle Iscar Peyra (señalado en amarillo). Todas las plazas, plazoletas y áreas ajardinadas de los entornos de la Plaza Mayor adolecen de aparcamientos para bicicletas. Si es un problema estético y patrimonial, pues existen efectivamente muchos otros lugares susceptibles de utilizar para el aparcamiento (los señalamos en verde). Pero es posible. Al menos así nos lo han hecho ver con la instalación de una base de bicicletas de SALENBICI en la Plaza Poeta Iglesias. Si hay posibilidad de anclar elementos con obra al pavimento de los entornos de la plaza, también podría darse el mismo caso -aunque atornillado- de varios aparcamientos de bicicletas.
Lugares susceptibles de colocación de aparcamientos para bicicletas en los entornos de la Plaza Mayor. www.salamancaenbici.com |
Es, en definitiva, una lamentable situación que salamancaenbici ha constatado desde hace más de 6 años cuando se remodeló la Plaza del Corrillo con el único aparcamiento de bicicletas regulado junto a la plaza. Posiblemente en más utilizado en aquel momento.
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