La semana pasada el alcalde de Salamanca amenazaba por fin un nuevo plan de movilidad urbana en la ciudad. No sabemos cuánto ha costado, quiénes lo han hecho, con quiénes se ha establecido consultas o, en definitiva, qué sentido tiene y para qué sirve un plan de movilidad. En principio y según lo que se comenta en los medios sirve para:
1- prohibir la circulación de bicicletas por las calles peatonales y
2- para ver dónde se pueden construir aparcamientos subterráneos.
Esto es, aparentemente, lo que un plan de movilidad urbana sostenible determina, tal y como nos cuenta el alcalde de la ciudad de Salamanca.
Resulta por tanto llamativo que siendo sostenible el plan, aún no se haya hablado ni de autobuses urbanos y/o metropolitanos, de itinerarios peatonales, de medidas blandas como la pacificación del tráfico, la creación de áreas 30, la intermodalidad, los carriles compartidos o los itinerarios peatonales.
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| Comparación de velocidades de diferentes medios de circulación. www.salamancaenbici.com |
Parece ser que lo que interesa es, sin más, el aparcamiento de coches. Para ello, tal vez ni siquiera haga falta elaborar un plan de movilidad y menos con criterios sostenibles. En muchas otras ciudades los planes de movilidad urbana sostenible han servido para implicar a los agentes sociales en las decisiones sobre la movilidad en los barrios. Las asociaciones de vecinos, los comerciantes, los colectivos peatoneales o ciclistas, los empresarios y los servicios públicos implicados con la construcción de la ciudad, participan en reuniones regulares a través de las cuales la sostenibilidad del plan se apoya en la participación. Porque para Salamancaenbici, la sostenibilidad también tiene un componente social y la participación ayuda a que los planes se conviertan no solo en sostenibles desde el punto de vista ambiental, sino también en el ámbito de la corresponsabilidad y la condescendencia social y, sobre todo, la pluralidad. Así, los pactos por la movilidad o los foros de movilidad son siempre una baza de cualquier plan, de tal forma, que las medidas incorporadas en el plan, se convierten en consenso social y, por lo tanto, asumibles en toda su magnitud.
En Salamanca, aún no conocemos algo así. Se practica una política de todo para el pueblo pero sin el pueblo y, hablar de ciudad, siempre resulta incómodo para unos gobernantes poco dados a ceder parte de su "parcelita" de poder. Por eso, a pesar de oír hablar de presupuestos participativos, consejos consultivos, foros de opinión, etc., en Salamanca nunca se ha optado por su cristalización.
La prohibición de la circulación de bicicletas por calles peatonales de nuestra ciudad pasa por alto la necesidad de compatibilizar de forma integradora dos medios de transporte bien sostenibles: la bicicleta y el caminar. Dos medios acordes con una ciudad moderna y propios de una sociedad madura en la que el principal enemigo no debería ser la bicicleta sino el tráfico motorizado. Lo hemos dicho en muchas ocasiones. La bicicleta circula por aceras y calles peatonales porque la intensidad y la magnitud del tráfico motorizado es agresivo, violento y peligroso para aquellas personas que quieren probar con la bicicleta. Mientras se hipotecan aceras para la circualación de bicicletas, los carriles de coches siguen siendo los mismos y además ello ampara una manifiesta y equivoca convicción de que Salamanca es cada vez más sostenible. Salamanca es la misma que siempre, tiene el mismo tráfico motorizado, la misma densidad de vehículos, los mismos atascos, solo que se le han añadido más viales ciclistas en espacios del peatón.
Salamancaenbici apuesta por la pacificación y la regulación del tráfico en muchas de las avenidas del centro. Si las condiciones fueran óptimas ¿por qué los ciclistas pedalean por las calles peatonales? ¿Por qué no hay alternativas? En el caso de la calle Toro existen itinerarios alternativos en este momento, pero ninguna de ellos es más rápido y eficaz que la propia calle. En el caso de la calle Zamora nos pasa lo mismo, de subida o de bajada las alternativas son incómodas y peligrosas en muchos casos. Todos los itinerarios son intrincados, más largos, con cuestas o adoquines, llenos de tráfico y, en definitiva, poco alternativos.
En el caso de ofrecer alternativas como ha dicho nuestro alcalde, pensamos que ciertos sentidos deberían cambiarse para facilitar la circulación en bicicleta. Ya ni siquiera planteamos la posibilidad de circular en sentido contrario como ocurre en TODAS las ciudades de Francia. Recordemos que Francia es el país que está al otro lado de los Pirineos.
La prohibición de la circulación de bicicletas por calles peatonales de nuestra ciudad pasa por alto la necesidad de compatibilizar de forma integradora dos medios de transporte bien sostenibles: la bicicleta y el caminar. Dos medios acordes con una ciudad moderna y propios de una sociedad madura en la que el principal enemigo no debería ser la bicicleta sino el tráfico motorizado. Lo hemos dicho en muchas ocasiones. La bicicleta circula por aceras y calles peatonales porque la intensidad y la magnitud del tráfico motorizado es agresivo, violento y peligroso para aquellas personas que quieren probar con la bicicleta. Mientras se hipotecan aceras para la circualación de bicicletas, los carriles de coches siguen siendo los mismos y además ello ampara una manifiesta y equivoca convicción de que Salamanca es cada vez más sostenible. Salamanca es la misma que siempre, tiene el mismo tráfico motorizado, la misma densidad de vehículos, los mismos atascos, solo que se le han añadido más viales ciclistas en espacios del peatón.
Salamancaenbici apuesta por la pacificación y la regulación del tráfico en muchas de las avenidas del centro. Si las condiciones fueran óptimas ¿por qué los ciclistas pedalean por las calles peatonales? ¿Por qué no hay alternativas? En el caso de la calle Toro existen itinerarios alternativos en este momento, pero ninguna de ellos es más rápido y eficaz que la propia calle. En el caso de la calle Zamora nos pasa lo mismo, de subida o de bajada las alternativas son incómodas y peligrosas en muchos casos. Todos los itinerarios son intrincados, más largos, con cuestas o adoquines, llenos de tráfico y, en definitiva, poco alternativos.
En el caso de ofrecer alternativas como ha dicho nuestro alcalde, pensamos que ciertos sentidos deberían cambiarse para facilitar la circulación en bicicleta. Ya ni siquiera planteamos la posibilidad de circular en sentido contrario como ocurre en TODAS las ciudades de Francia. Recordemos que Francia es el país que está al otro lado de los Pirineos.
Ver Alternativas a la calle Zamora y Toro www.salamancaenbici.com en un mapa más grande
Lo primero, felicitarte por tu blog que ha sido todo un descubrimiento y me parece interesantísimo. Por favor, sigue escribiendo sobre la bici en Salamanca porque muchos te lo agradeceremos.
ResponderEliminarMe gustaría comentar un par de cosillas:
-La empresa redactora del Plan General de Movilidad Urbana sostenible es la madrileña MECSA y las intenciones y tanteos iniciales los puedes consultar en esta presentación http://www.rescatame.eu/FileFromDatabase.aspx?id=111 No cuentan nada en concreto pero sí se ve cierta intención de apostar por modelos de pacificación del tráfico (vías de coexistencia, vías salón, reducción del espacio de circulación del tráfico motorizado, vías de geometría variable que ayuden a moderar la velocidad del coche...) Confío que la propuesta final si contemple una serie de medidas que muchos estamos esperando (Aunque sí, sé que resulta chocante hablar de woonerfs y a la vez seguir cuestionando el retirar la mediana del Paseo de la Estación)
No intentes buscar la web de MECSA porque no funciona.
-Lo de las calles Toro y Zamora, pues sí, me parece exagerado el prohibir la circulación de bicicletas pero no me parece descabellado que se limite el paso a bicicletas en momentos puntuales del día de máxima afluencia de peatones. Yo soy el primero que evita la Calle Toro cuando está atestada de gente. Sé que en el ayuntamiento se está tanteanto la prohibición sólo a ciertas horas.
-Sobre las alternativas... Pues sí, imagino que con una calle Azafranal-Pozo Amarillo liberada de tráfico de paso y aparcamiento en superficie y reservada a peatones, bicis y autobuses probablemente sí sería una alternativa a la calle Toro. Otras calles como Iscar Peyra podrían permitir la circulación de las bicis en sentido contrario ya que se han construído con un carril de anchura sobredimensionada que permitiría el cruce cómodo de bicis y vehículos a motor.
-Lo de los aparcamientos es lo típico que se filtra y que interesa a la prensa local y al grueso de la población, que, no nos engañemos, sigue creyendo que a mayor número de infraestructuras destinadas al vehículo privado (carriles de circulación y aparcamientos de todo tipo) más fluidez y por lo tanto "calidad de vida" cuando es evidente que no es así. En Salamanca hay un aparcamiento infrautilizado en la Avenida de Portugal y la población está demandando otro en Mirat al que consideran céntrico cuando distaría únicamente doscientos metros del primero. Sabes que La Gaceta no va a lanzar un titular en portada que diga "Salamanca apostará por las vías de coexistencia para mejorar la movilidad urbana" porque ni vende, ni se entiende. Lo que la gente quiere saber es dónde estarán los aparcamientos para sus coches a pesar de que esto forme parte de un plan más complejo redactado por profesionales y con medidas muy impopulares que unos pocos defenderemos y una gran mayoría demonizará, como demonizó en su día la peatonalización de las calles Toro y Zamora.
- Y sí; es una vergüenza cómo se está enfrentando al ciclista urbano con los peatones al poner en conflicto dos maneras de desplazarse a las que se obliga a repartirse un espacio escaso mientras el coche domina el grueso de la sección de nuestras calles. Es normal cierta animadversión por parte del peatón cuando lo que se está haciendo es obligarle a ceder al ciclista parte de su ya escaso espacio. En Salamanca hay ejemplos surrealistas con vías de doble carril por sentido totalmente injustificadas. Ej: Todas las de la zona de Carrefour. TODAS. Sin embargo estas barbaridades nadie las cuestiona. Imagina que construyesen un carril-bici con cuatro carriles, sería ridículo, tan ridículo como las decenas de calles de cuatro carriles para coches que pueblan Salamanca y que soportan una intensidad de tráfico ridícula. Más Ejemplos: Alfonso IX o Doña Urraca.
Espero no haberte aburrido mucho.
Un saludo y no dejes de escribir.
Hola, muchas gracias por tus comentarios.
ResponderEliminarLa verdad es que nos sorprende que alguien en esta ciudad sepa reconocer una vía sobredimensionada, de geometría variable o, incluso, una woornef. Conocemos tu blog y los seguimos habitualmente, sobre todo desde que presentaste un plano de itinerarios ciclistas hace cosa de dos años. Desde luego nos alenta saber que no estamos solos en esta lucha sinigual por construir una ciudad entre todos y para todos.
Con respecto a las las vías sobredimensionadas citas algunas pero sería muy interesante realizar un plano con todas las vías sobredimensionadas de Salamanca. Advertimos que serán muchas más de las que nos imaginamos. Contamos con que el nuevo plan haya analizado todo ello pero, en cualquier caso, estaremos pendientes de los resultados.
A nosotros no nos consta que la empresa que citas haya hecho ni una sola consulta a agentes sociales y ello nos preocupa enormemente. De hecho nos encantaría leerles en alto alguno de los capítulos de un manual básico pero atrevido que publicó el IDAE sobre la elaboración de PMUS (lo conocerás)
Con respecto a la calle Toro y Zamora, estaríamos de acuerdo con lo de administrar los tiempos de circulación por estas calles como ya se hace (pero no se cumple) por ejemplo en Sevilla. De todas formas, nos da rabia no atacar el problema desde raíz y que tú mismo reconoces: (1) usurpación al peatón de su espacio mediante itinerarios cilistas segregados, (2) densidad y velocidad excesiva del tráfico motorizado y (3) ausencia total de medidas de discriminación positivas para los medios no sostenibles. Pongamos por ejemplo que en Salamanca existe tan solo un vial compartido de no más de 800 m. para BUS, Moto, bici y Taxi en María auxiliadora (y solo de bajada). También recordar que la Gran Vía, eje de las comunicaciones de bus urbano no dispone a día de hoy con carriles segregados. Por tanto, insistimos que el origen del conflicto arranca en la calzada y, mientras no se tomen medidas de pacificación y segregación de medios de transporte, no se resolverá el asunto de las aceras. Como en todo, pensamos que muchas veces olvidamos a la educación, la sensibilización y, en general, la capacidad que tiene una sociedad de cambiar sus hábitos y percepción a partir de un proceso de maduración de ideas desde la participación y el protagonismo de asociaciones y demás gremios. En ¡Salamanca no existe una escuela de ciclismo municipal! ¡La policía municipal sigue apostando por los cursos de educación vial desde una óptico demasiado cochecentrista! La desaparición de la Semana de la Bici del Comité Guardabarros después de ¡10 años! es por ejemplo un síntoma inequívoco de que la administración no confía ni quiere confiar en los colectivos que fomentan los transportes sostenibles y no disponen de medios suficientes. Por otro lado, la SEM no termina de calar y ni siquiera se cuenta con llegar a determinados agentes que, aunque escasamente concienciados sobre cómo debe gestionarse el aparcamiento en una ciudad, podrían intervenir activamente y así comenzar a dejar de creer aquello de que "puedo y debo aparcar delante del portal de mi casa". Posiblemente la próxima entrada verse sobre todas esas medidas blandas para una movilidad sostenible de verdad (incluyendo cicleability, walkability, rutas peatonales, tipos de crossing...puffin, toucan, pelican, desvíos de eje de calzada, supermanzanas, plataformas peatonales y, en general, un elenco de medias inteligentes y no necesariamente costosas. De acuerdo con tu percepción de la prensa local. Sin duda, una de las principales amenazas para un cambio necesario hacia una Salamanca moderna y a la altura de los nuevos tiempos.